Los 10 errores más comunes que comete la gente que quiere bajar de peso

¿Por qué las dietas siempre se acaban?

¿Por qué hay más fracasos que éxitos?

Creo que la respuesta son estos 10 errores. Por culpa de ellos los intentos por bajar de peso duran poco tiempo, no arrojan resultados positivos y esta falta de resultados agota y facilita el abandono.

Estos 10 errores son:

1-Sienten que para bajar de peso hay que pasar hambre. Si no tienen la sensación de hambre creen que no van a bajar de peso. Entonces comienzan a “no comer” en lugar de elegir “comer mejor, porciones más pequeñas y con ingestas más frecuentes”.

2-Creen que comiendo alimentos light o diet o veganos o sin gluten o verdes u orgánicos es suficiente para lograr un descenso. Entonces encarecen su compra innecesariamente y esto hace que la situación sea insostenible en el tiempo.

3-Creen que eliminar los hidratos es imprescindible para bajar de peso. A partir de esta creencia comienzan a comer “sin harinas” hasta caer en una situación de tal abstinencia que cuando se sientan frente a un plato de pastas no pueden parar. Y pasan rápidamente de un consumo cero a un consumo exagerado y en forma de atracón cuando de verdad lo único que deberían hacer es aprender a comer los hidratos y aprender a elegirlos mejor.

4-No consumen suficiente cantidad de proteínas en cada comida con lo que el metabolismo va ralentizándose y llega el momento tan temido en que creen que están consumiendo correctamente y sin embargo no logran el descenso de peso

5-Quieren bajar rápido para llegar velozmente al final del tratamiento y comer de todo cuando estén flacos. Y la verdad es que no funciona así, el proceso debe ser lento y conlleva necesariamente un aprendizaje en el “mientras tanto voy bajando” para que al final del tratamiento puedan quedarse con el aprendizaje y nunca vuelvan a comer mal ni reboten en la balanza. Porque lo valioso no es el descenso sino el aprendizaje conseguido en el proceso

6-No duermen lo suficiente o no logran bajar el estrés. Esto aumenta el cortisol sanguíneo y una persona con cortisol aumentado tiene mucha dificultad en bajar de peso

7-Creen que la actividad física no es importante. Y en realidad tener  una vida activa actúa en conjunto y como equipo de un buen consumo alimentario. La buena selección alimentaria y el consumo saludable es la base, pero la actividad física es el puntal que permite que los cambios sucedan.

8-Dan demasiado protagonismo a la balanza. Apuntar a un número en la balanza es una meta equivocada. Aunque ese número nos permita fijar el objetivo y el tiempo necesario para lograrlo, en realidad lo que tiene valor es el camino, el aprendizaje, el conocimiento y el cambio de hábitos que permanecen en el tiempo.

9-Pasan de una dieta a otra constantemente. Esto hace que el cuerpo empiece a crear una resistencia a las dietas. Estos pacientes se llaman dietantes y rara vez obtienen resultados porque le han enseñando a su cuerpo a sostenerse con menos aporte calórico.

10-Enfrentan los cambios alimentarios en soledad. Nadie puede comer diferente al resto de su familia durante mucho tiempo. Por eso las formas de comer “exóticas” o “restrictivas” no se pueden sostener. Los cambios alimentarios tienen que darse conjuntamente con el grupo conviviente. Todos aprenden y todos sostienen lo aprendido. La familia no debe quedar afuera de los cambios y el paciente no debe quedar solo en su tratamiento

PARA RECORDAR:     

Una alimentación saludable es aquella que promueve la salud y previene la enfermedad, debe ser completa, suficiente, variada, placentera, sostenible en el tiempo y debe respetar las tradiciones y las costumbres de la persona para que pueda ser compartida.